Las bancas se vaciaron y se desató una gran pelea en medio del infield durante la primera entrada del partido entre los Rockies de Colorado y los Gigantes de San Francisco el martes, después de que Rafael Devers conectara un jonrón profundo al principio.

El problema, sin embargo, pareció deberse a la reacción de Devers a su jonrón de dos carreras, QUIEN observó durante mucho tiempo cómo el jonrón salía del estadio antes de empezar a correr, lo que no le sentó bien al abridor de los Rockies, Kyle Freeland.

Ambos comenzaron a intercambiar chistes antes de que Devers siquiera llegara a primera base, y luego la situación se intensificó rápidamente. Incluso hubo puñetazos en el infield en un momento dado, cuando jugadores de ambos equipos se abalanzaron sobre el desorden.

Expulsiones regresaron a Rafael Devers a la tercera base.

Los árbitros finalmente separaron a los dos equipos y controlaron el juego, sin embargo el lanzador Kyle Freeland fue expulsado, al igual que los jugadores de los Gigantes Matt Chapman y Willy Adames, cuyos movimientos dejaron a los Gigantes sin su tercera base y campocorto.

Rápidamente, el dirigente Bob Melvin movió sus fichas, colocando a Christian Koss en el campocorto, Dominic Smith salió desde la banca para hacerse cargo de la primera base y Rafael Devers fue enviado a la tercera base, cuya posición está defendiendo por primera vez desde los entrenamientos de primavera.

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La decisión no pasó desapercibida, ya que Devers había sido adquirido por los Gigantes para ocupar la inicial de manera estable. Su improvisado regreso a la tercera base podría generar dudas sobre cómo se ajustará la defensa del equipo en los próximos compromisos, especialmente si Chapman recibe sanciones adicionales.