Los Yankees de New York continúan ajustando su cuerpo monticular en plena recta final de la temporada 2025, anunciaron una serie de movimientos significativos en su roster activando a Luis Gil e inhabilitando a Jonathan Loaisiga en las Grandes Ligas 2025.

Luis Gil, quien había estado fuera de acción desde hace varios meses mientras completaba su asignación de rehabilitación, fue reincorporado de la lista de lesionados de 60 días y ocupará su lugar en el roster del equipo grande. El dominicano representa una inyección de juventud y potencia para la rotación, se espera que sea el encargado de tomar la bola este domingo en el último juego cuando los Yankees intentan evadir la barrida ante los Marlins de Miami.

Su regreso genera expectativa, especialmente por el buen rendimiento que mostró antes de su lesión, cuando lideraba a los novatos en ponches por cada nueve entradas y demostraba un control más refinado en comparación con años anteriores; incluso, ganó el premio al Novato del Año de la Liga Americana.

En contraste, los Bombarderos del Bronx sufren una baja en el bullpen con la salida del nicaragüense Jonathan Loaisiga, quien fue colocado en la lista de lesionados de 15 días por una tensión en la parte media de la espalda derecha, en un movimiento retroactivo al 2 de agosto. Loáisiga ha sido uno de los brazos menos confiables del relevo este 2025, posee 4.25 de efectividad con 25 ponches en 29.2 entradas de labor en 30 juegos.

Con estos movimientos, los Yankees de New York intentan mantener la estabilidad en su pitcheo, una de las claves para mantenerse competitivos en la lucha por un puesto en los playoffs. El regreso de Gil podría resultar determinante, especialmente si logra retomar el nivel que lo convirtió en una de las revelaciones del montículo a comienzos de año.

El cuerpo técnico del equipo aún no ha revelado si Luis Gil tomará una apertura pronto o si será utilizado inicialmente como relevista largo. En cualquier caso, su presencia vuelve a fortalecer una rotación que ha sido golpeada por lesiones, al mismo tiempo que se abre una nueva incertidumbre con la salud de Loáisiga. Todo apunta a que los próximos días serán decisivos para medir el impacto de estos ajustes en las aspiraciones del club de cara a octubre.