El campocorto Xander Bogaerts de los Padres de San Diego tuvo algo que decir sobre el hecho de que su viejo equipo, los Red Sox de Boston, intercambiaran al tambien su ex compañero Rafael Devers a los Gigantes de San Francisco.
Devers ahora será vecino y rival de división de Xander Bogaerts, quien jugó junto a él desde el 2017 hasta previo a la temporada 2023. Ambos pasaron varios años jugando juntos entre la tercera base y el campocorto para los Red Sox de Boston. Sin embargo, ese dúo se terminó en el momento en que Bogaerts partió a la agencia libre y firmó un acuerdo de 11 años con los Padres de San Diego.
Un año después, Devers firmó una extensión de 10 años y 331 millones de dólares con los Red Sox de Boston, para ser la cara de la organización durante lo que restaba de la década y reconstruir el roster con base en su presencia. A pesar de que esos eran los planes, estos se derrumbaron, ambas partes tuvieron sus inconvenientes y decidieron romper sus vínculos.
El pasado domingo 15 de junio, Rafael Devers fue enviado a los Gigantes de San Francisco a cambio de los jugadores James Tibb, Jose Bello, Jordan Hicks y Kyle Harrison; al mismo tiempo, su nuevo equipo aceptó absorber lo que resta de su contrato.
Lo que dijo Xander Bogaerts.
Los medios fueron directamente donde Bogaerts a preguntarle qué opinaba sobre que a quien un día llamó su mejor amigo del béisbol, ahora será su rival directo y tendrán que verse las caras más a menudo.
“Eso hizo que [los Giants] fueran mucho mejores. No lo vamos a negar. Es un jugador muy importante”, dijo Xander Bogaerts, confesando que están conscientes del impacto que tendrá Devers con los Gigantes.
Tal y como era de esperarse la llegada de Rafael Devers a la división oeste de la Liga Nacional no pasará desapercibida; otro jugador estelar se une a dicho grupo que ya posee a otros grandes nombres como Shohei Ohtani, Freddie Freeman, Mookie Betts, Manny Machado, Fernando Tatis Jr, Ketel Marte, entre otros.
Viejos amigos, nuevos adversarios,
Aunque Bogaerts y Devers forjaron una amistad profunda en Boston, la realidad del béisbol los obliga ahora a enfrentarse con frecuencia. La División Oeste de la Liga Nacional verá más choques directos entre ambos, añadiendo un matiz emocional a los ya intensos duelos entre Padres y Gigantes.
La historia entre Bogaerts y Devers no ha terminado. Solo ha cambiado de capítulo. Ahora, estarán en bandos opuestos, pero siempre con respeto mutuo. Y para los fanáticos, eso solo significa una cosa: más espectáculo en el diamante.