El receptor de los Marineros de Seattle, Cal Raleigh, cree que el cerrador estelar Andrés Muñoz estaba desviando los lanzamientos al desperdiciar una ventaja de dos carreras en la novena entrada el jueves por la noche contra los Yankees de New York.

Muñoz desperdició su sexto salvamento en 27 oportunidades esta temporada después de que el abridor Bryan Woo mantuviera a los Yankees sin hits hasta la octava. Con los Marineros arriba 5-3, Muñoz entró en la novena. Permitió un sencillo a Trent Grisham para abrir la entrada y otro a Cody Bellinger con un out, antes de que Ben Rice se recuperara de un conteo de 0-2 para conseguir una base por bolas que llenó las bases con dos outs.

De pie en segunda base, mientras Austin Wells bateaba, Bellinger movió los brazos cuando Andrés Muñoz lanzó su slider. Wells tomó un cambio de velocidad justo debajo de la zona de strike para la tercera bola, y en el siguiente lanzamiento conectó una recta con cuenta completa al jardín derecho para un sencillo de dos carreras que empató el juego.

Poco después, Aaron Judge conectó un elevado de sacrificio con bases llenas que remolcó a Anthony Volpe con la carrera ganadora del partido en la parte baja de la décima entrada.

Lo que dijo Cal Raleigh.

“Siempre se desviaba (con un corredor) en segunda base. Obviamente, no lo hacían con mucha discreción, pero es parte del juego. Tenemos que ser más conscientes de eso antes de la serie, y eso lo hizo muy difícil al final. Intentas hacer lo mejor que puedes sin distraerlo de lo que está sucediendo en el plato. Así que eso es algo que tendremos que resolver en los próximos días, sin duda” dijo Raleigh sobre Muñoz

Manager de Seattle desmiente a Raleigh.

Sin embargo, el mánager interino de Seattle, Dan Wilson, se apresuró a restarle importancia a las declaraciones de Raleigh y a disipar las especulaciones. “No creo que sea así”, dijo Wilson al ser cuestionado sobre si Muñoz estaba siendo predecible. “Simplemente creo que nos metimos en conteos difíciles y ellos se aprovecharon”.

La situación ha generado cierto revuelo dentro del clubhouse de los Marineros, en especial porque se trata de su cerrador más confiable. Mientras el equipo trata de mantenerse en la pelea por la postemporada, corregir posibles errores en la comunicación entre receptor y lanzador se vuelve clave.

Ya sea por señales descubiertas o simplemente por una mala ejecución, los Marineros dejaron escapar una victoria que parecía segura, y ahora deberán trabajar en los detalles que pueden marcar la diferencia en la recta final de la campaña.