El cerrador de los Filis de Filadelfia, Jhoan Duran, le enseñó al mundo del beisbol que tan difícil puede ser batear y tomó de ejemplo a los Mets de New York el pasado jueves en las Grandes Ligas.

Mediante el cuarto juego de la serie entre los Mets de New York vs. los Filis de Filadelfia, Jhoan Duran fue el encargado de sellar la barrida cuando se le entregó el juego con dos carreras de ventaja en la novena entrada para enfrentar a los tres bateadores de mayor poder de la alineación rival: Juan Soto, Pete Alonso y Mark Vientos.

Lejos de intimidarse, el lanzallamas de los Filis aplicó la misma receta a cada uno. Con una mezcla mortal de splitters que se desplomaban, curvas con quiebre tardío y rectas infernales que superaban las 100 millas por hora, Durán ponchó consecutivamente a Soto, Alonso y Vientos, sin ceder terreno en el conteo en ningún momento.

El Citizens Bank Park, con más de 40,000 fanáticos presentes, estalló en júbilo mientras Durán levantaba los brazos tras conseguir el último out. La escena no solo selló la barrida, sino que también dejó un mensaje claro: enfrentar a Jhoan Durán en la novena entrada puede ser una misión imposible.

Video:

Jhoan Duran, una bendición para los Filis.

Desde que los Filis de Filadelfia se hicieron de sus servicios en la pasada fecha límite de cambios, Jhoan Duran suma 13 salvamentos en 14 oportunidades, acompañado de una sólida efectividad de 1.23 con 20 pònches en 14.2 entradas. Su AVG colectivo permitido es de .214. Y como si fuera poco, en términos generales posee 29 salvamentos con 1.83 de efectividad y 73 ponches.

La escena fue un recordatorio perfecto de lo impredecible y complejo que es el arte de batear en las Grandes Ligas. Ni siquiera estrellas de la talla de Soto o Alonso pudieron descifrar los envíos de un cerrador que parece lanzar desde otra dimensión.