El joven abridor de los Rays de Tampa Bay, Taj Bradley, ha revelado recientemente su interés en representar a la Selección Nacional de Béisbol de México en el próximo Clásico Mundial de Béisbol 2026. En una conversación con el periodista Luis Murphy, el prometedor lanzador expresó su entusiasmo por la posibilidad de vestir los colores del combinado mexicano, afirmando que ya se han iniciado conversaciones con los responsables del equipo.
“Hay muy buenas esperanzas de que pueda jugar con ellos el próximo año”, declaró Bradley, quien se encuentra evaluando sus opciones internacionales.
Arozarena y Aranda hacen las conexiones.
La conexión con la selección mexicana ha sido facilitada por dos de sus colegas: el jardinero Randy Arozarena, uno de los principales referentes de México en el último Clásico Mundial, y el versátil infielder Jonathan Aranda. Ambos jugadores han sido clave para que Bradley se pusiera en contacto con el gerente general del equipo nacional mexicano, lo que deja entrever que las conversaciones van por buen camino.
Aunque nacido en Estados Unidos, Taj Bradley podría representar a México si cumple con los requisitos de elegibilidad establecidos por el torneo, los cuales permiten la participación de peloteros con vínculos familiares o de nacionalidad. Esta apertura ha permitido en el pasado que jugadores como Arozarena, nacido en Cuba, se convirtieran en símbolos del equipo mexicano, y ahora Bradley podría seguir ese mismo camino.
A sus 23 años, Taj Bradley es considerado uno de los lanzadores con mayor proyección dentro del cuerpo monticular de los Rays. Su combinación de velocidad, control y madurez en el montículo ha captado la atención de la liga, y su participación en el Clásico Mundial representaría un impulso significativo para el staff de pitcheo mexicano, que buscará igualar o superar su histórica actuación de 2023, cuando llegaron a las semifinales del torneo.
La posible inclusión de Bradley en el roster de México para 2026 también evidencia el crecimiento del proyecto de la Federación Mexicana de Béisbol, que continúa atrayendo talento de primer nivel con raíces o vínculos con el país. Si se concreta su participación, Taj Bradley no solo fortalecerá la rotación mexicana, sino que también se convertirá en otro ejemplo del atractivo internacional que ha ganado el equipo azteca en los últimos años.