Rafael Devers ha comenzado una nueva etapa en su carrera con los Gigantes de San Francisco, y lo ha hecho con una actitud abierta y profesional. Tras su sorpresiva salida de los Red Sox de Boston, el antesalista dominicano fue consultado sobre su posible rol defensivo en su nuevo equipo, y su respuesta dejó claro que está dispuesto a adaptarse.
“Ellos son los que mandan. Estoy aquí para jugar donde quieran”, aseguró Rafael Devers ante los medios, en referencia a las decisiones del cuerpo técnico de los Giants. Aunque ha sido tercera base durante toda su carrera en Grandes Ligas y con un rol que desempeñó como designado en Boston, no descartó asumir otras responsabilidades si el equipo así lo requier en primera base y como bateador designado.
Rafael Devers no descarta defender una nueva posición
La versatilidad defensiva no ha sido una característica destacada de Devers, pero la disposición a ajustarse podría ser clave en una franquicia que valora la flexibilidad en su plantilla. San Francisco, que recientemente ha promovido a varios jóvenes talentos del infield, podría utilizar a Devers en funciones más rotativas o incluso probarlo eventualmente como bateador designado en juegos interligas o series complicadas.
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En lo inmediato, se espera que continúe cubriendo la antesala, pero su declaración evidencia una mentalidad de equipo, algo que encaja bien con la cultura que buscan reforzar los Gigantes. Devers llega a la organización tras más de una década con Boston, donde se consolidó como uno de los bates más peligrosos de la Liga Americana. Su mudanza al exigente Oracle Park plantea nuevos desafíos ofensivos, pero su enfoque colectivo parece intacto.
El manager Bob Melvin aún no ha detallado si habrá ajustes defensivos para Devers, pero sí ha destacado su impacto inmediato en el clubhouse. La disposición del dominicano podría facilitar su integración a un equipo que lucha por mantenerse competitivo en la división Oeste.
