La reciente salida de Rafael Devers de los Red Sox de Boston a los Gigantes de San Francisco ha generado un torbellino de especulaciones, pero el gerente general, Craig Breslow, ha aclarado un punto clave: Devers nunca solicitó formalmente un cambio.
Sale a la luz la verdad sobre si Rafael Devers pidió ser cambiado
Contrario a los rumores iniciales, Breslow enfatizó que, aunque el campamento de Rafael Devers expresó apertura a un nuevo comienzo, no hubo una demanda explícita de traspaso. Esta declaración desmiente las narrativas que sugerían un conflicto irreconciliable entre el jugador y la organización.
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El presidente del equipo, Sam Kennedy, profundizó en las razones detrás de la decisión, admitiendo que no se logró un “alineamiento” con Rafael Devers pese a múltiples esfuerzos. Kennedy, junto a Breslow, el mánager Álex Cora y el propietario John Henry, intentaron retener al tercera base dominicano, figura clave del equipo por su poder ofensivo.
Sin embargo, la falta de consenso sobre la visión a futuro llevó a los Red Sox a tomar una decisión audaz, enviando a Rafael Devers a San Francisco a cambio del relevista Jordan Hicks, el prospecto Kyle Harrison y otros jugadores.
El periodista Mike Rodríguez reveló que Rafael Devers mantuvo contacto directo con John Henry, incluyendo un desayuno privado tras una reunión en Kansas City, lo que contradice la idea de que el jugador ignoró a la directiva. Este detalle refuerza que la salida de Rafael Devers no fue por un capricho, sino el resultado de una evaluación estratégica.
La partida de Rafael Devers marca el fin de una era para los Red Sox, pero también el inicio de una reestructuración enfocada en el futuro. Aunque dolorosa, la decisión refleja la convicción de la directiva en priorizar el crecimiento a largo plazo sobre la nostalgia, abriendo un nuevo capítulo para el equipo y sus fanáticos.
