Rafael Devers, el estelar toletero dominicano, ha sido traspasado de los Boston Red Sox a los San Francisco Giants en un movimiento que sacude la MLB.
Este cambio, reportado el 15 de junio de 2025 por el periodista Robert Murray, implica un sacrificio significativo para Rafael Devers, no solo en lo profesional, sino también en lo personal y simbólico.
El cambio que deberá hacer Rafael Devers para jugar en San Francisco
Desde su debut en 2017, Rafael Devers ha vestido exclusivamente el número 11, un símbolo de su identidad en Boston, donde brilló con tres selecciones al All-Star, dos Silver Slugger y un título de Serie Mundial en 2018.
Sin embargo, en San Francisco, el número 11 está retirado en honor al legendario Carl Hubbell, miembro del Salón de la Fama. Cambiar de número puede parecer un detalle menor, pero para un jugador con una conexión tan fuerte con su identidad en el campo, representa un ajuste emocional significativo.
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Además, Rafael Devers deja atrás un contrato récord de 10 años y $313.5 millones con los Red Sox, un equipo donde era el rostro de la franquicia. Mudarse a San Francisco implica adaptarse a una nueva ciudad, una fanaticada diferente y un entorno competitivo en la División Oeste de la Liga Nacional.
Aunque su versatilidad como tercera base y bateador designado encaja perfectamente en el roster de los Giants, el cambio de cultura y presión por consolidar un equipo contendiente añaden un desafío adicional.
El traspaso también significa dejar atrás la histórica rivalidad de Boston y un legado que Rafael Devers ayudó a construir. A cambio, los Giants ofrecen una oportunidad para liderar un lineup en busca de grandeza.
Este sacrificio personal y profesional será clave para que Rafael Devers demuestre su capacidad de adaptación y liderazgo en un nuevo capítulo de su carrera.
