Durante una transmisión en vivo con ESPN, el campocorto dominicano Willy Adames vivió un momento de genuina sorpresa al recibir una noticia que cambiaría por completo el panorama de su equipo: los Gigantes de San Francisco acababan de adquirir a Rafael Devers. Lo que parecía ser una entrevista más sobre su gran temporada tomó un giro inesperado cuando, con el micrófono aún encendido, un reportero le comunicó que los Gigantes habían concretado un cambio bomba con los Red Sox para hacerse con los servicios de la estelar tercera base.

Willy Adames, uno de los líderes del clubhouse de los Gigantes, visiblemente emocionado, mientras procesaba la noticia en tiempo real. Su reacción espontánea no tardó en viralizarse en redes sociales, mostrando la emoción sincera de un jugador que no solo ganaba a un nuevo compañero de equipo, sino también a un compatriota y amigo.

““Muy emocionado. Yo estoy realmente emocionado de tenerlo en el equipo, obviamente el es uno de los mejores bateadores del juego. Y tenerlo en el mismo equipo, será más difícil derrotarnos con él en la alineación” dijo Adames.

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La llegada de Rafael Devers a San Francisco, en un cambio que incluyó a varios jugadores jóvenes como Kyle Harrison, Jordan Hicks, James Tibbs y José Bello rumbo a Boston, representa una clara señal de que los Gigantes están apostando todo por competir en serio en la Liga Nacional.

Para Adames, quien ya había manifestado su deseo de tener más apoyo ofensivo en la alineación, la adición de Devers es justo lo que el equipo necesitaba.

No debe ser un secreto que pocas veces se tiene la oportunidad de ver a un jugador reaccionar en vivo a una noticia de este calibre. Y en el caso de Willy Adames, su asombro y alegría reflejaron no solo la magnitud del movimiento, sino también el vínculo especial que une a los peloteros dominicanos que triunfan en las Grandes Ligas.